Laura Cembranos Lajo es la “emocionada” pregonera de las fiestas de la Octava del Corpus Christi, quien con su discurso espera que los vecinos se sientan identificados a través de recuerdos, vivencias y anécdotas.
Zaratanera de pura cepa, Laura Cembranos Lajo es la persona que este año asume el papel de pregonera de las fiestas de la Octava del Corpus Christi. Vinculada al municipio por su familia materna, la joven periodista y presentadora de Castilla y León Televisión siente un gran arraigo por su pueblo, pues gracias a las raíces de varias generaciones que le inculcaron las tradiciones y la historia de Zaratán siente que esta oportunidad es una forma de reconocerle no solo a ella como zaratanera, sino también a todos sus familiares.
Aunque admite que nunca se le había pasado por la cabeza ser pregonera, cuando el Ayuntamiento contactó con ella el secretismo en torno al asunto le dio alguna pista. «Volvía de viaje cuando recibí el mensaje convocándome a una reunión sobre la que no podían darme más detalles por teléfono, no sabía qué podía ser, pero el pregón entraba dentro de las opciones». Así, unos días más tarde, Laura Cembranos Lajo pasó de ser una vecina más a la nueva y «muy emocionada» pregonera, pues, según recuerda, no le costó dar el sí quiero a esta propuesta que afronta como «una gran responsabilidad que me hace mucha ilusión».
Acostumbrada a las cámaras y a entrar en directo en los informativos regionales asume que el pregón «no será muy difícil», pero sí «uno de los directos más significativos» para ella. A su modo de ver, el discurso tiene que ser «cercano» y en el que los vecinos conozcan la conexión del pregonero con el municipio. Por ello, a pesar de no querer adelantar nada hasta el mismo día, revela que sus palabras estarán cargadas de recuerdos y vivencias.
Y es que para ella las fiestas del Corpus son mucho más que días festivos; «son momentos en los que compartes anécdotas y creas buenos recuerdos con tu gente». Por ello, rememora algunas de las actividades que han marcado sus fiestas a lo largo de los años, como los días de hinchables en la Plaza Mayor cuando era niña o las meriendas con la familia, pero también las reuniones con compañeros de trabajo, a quienes les ha hecho sentir las fiestas de Zaratán como si fueran auténticos zarataneros, y es ese arraigo y amor por su pueblo el que espera que haga de su pregón una felicitación de fiestas «muy emotiva y especial».
